jueves, 15 de diciembre de 2011

Y la pesadilla terminó… al menos por ahora, se acabaron esos días en que podía pasar todo el maldito día sentada frente a un escritorio estudiando de una manera en la que jamás me hubiese imaginado estar, se acabaron los interminables dolores de cabeza, los mareos ese nerviosismo sin control. Si bien soy amiga de mis cuadernos libros y apuntes nunca había estudiado de una manera tan brutal y tan desesperadamente como lo fue para la psu, tomando en cuenta que sólo disponía de unos cuantos días para poder hacer que mi rendimiento en dicha prueba fuese mejor que el que me esperaba, las notas del colegio me acompañaban pero sin embargo nunca es suficiente, la carrera que espero seguir me pide un muy alto puntaje, el cual creo que es un tanto difícil de alcanzar si no se obtiene la preparación adecuada, me refiero a dedicarse netamente a eso, está bien, si estudié, pero sin embargo no fue de la manera en que yo quería, fui temerosa, nerviosa y ansiosa, porque en verdad es un poco litigante que tu vida depende de esa prueba por decirlo de algún modo, tu futuro te lo asegura esa maldita prueba y ahora sólo me quedan esperar los resultados, nunca en mi vida he confiado en mi misma, nunca me he tenido fe en las cosas que hago, pero si llegara a quedar inmediatamente sería la persona más feliz del mundo, lo único que se es que ese día en que vea los resultados voy a llorar de todas formas, quede o no quede, uno sería por la frustración de dedicarme al colegio o bien porque he cumplido el sueño de mi vida, sea este o sea el próximo año se que lo cumpliré, me gustan los desafíos y soy muy competitiva, aún soy demasiado joven, tengo 17 años, pero pase lo que pase, espero que sea lo mejor para mi y poder tomar las decisiones correctas.